Lo que la naranja le hace a tus riñones.
Lo que la naranja le hace a tus riñones. Composición LR

¿La naranja es buena para los riñones? Expertos explican lo que sucede al consumirla

|28 abril 2025

En el Perú, la naranja sigue siendo una de las frutas cítricas más consumidas por su alto contenido de vitamina C y sus múltiples beneficios para la salud. Aunque suele compararse con otros frutos por su aporte nutricional, sigue destacando por su valor antioxidante, su capacidad antiinflamatoria y su efecto diurético, lo cual puede tener un impacto directo en el funcionamiento de los riñones.

Además de fortalecer el sistema inmunológico, la naranja contribuye a una mejor digestión, regula el colesterol y controla los niveles de azúcar en sangre. Gracias a su contenido en flavonoides, potasio, fibras y betacarotenos, también promueve la cicatrización y ayuda a mantener una piel sana. Sin embargo, los especialistas recomiendan consumirla con moderación, especialmente en personas con problemas renales, ya que su consumo excesivo puede alterar el equilibrio de minerales como el potasio en el organismo.

¿Quiénes deben tener cuidado con la naranja?

Aunque la naranja es conocida por ser una fruta beneficiosa, rica en vitamina C y con alto contenido de agua (alrededor del 90 %), no todos pueden consumirla libremente. Uno de sus principales componentes, el potasio, puede representar un riesgo para personas con enfermedades renales. De acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición (FEN), una ración promedio de naranja (225 g) aporta unos 329 mg de potasio, un valor significativo para quienes deben limitar este mineral en su dieta.

Uno de los componentes de la naranja es el potasio, el cual puede representar un riesgo para personas con enfermedades renales.

Uno de los componentes de la naranja es el potasio, el cual puede representar un riesgo para personas con enfermedades renales.

En estos casos, la recomendación es clara: no más de una pieza al día, ya sea como fruta o en jugo. Estas personas pueden optar por otras fuentes de nutrientes similares que contengan menos potasio. Para el resto de la población, no hay un límite estricto, aunque siempre se aconseja el consumo racional: dos naranjas al día, o su equivalente en jugo (aproximadamente cuatro unidades), es más que suficiente para disfrutar sus beneficios sin excesos.

Además, es importante recordar que el jugo de naranja contiene menos fibra y menos vitaminas que la fruta entera. Por ello, siempre será mejor consumirla fresca. Según un estudio liderado por la doctora Changzheng Yuan, de la Harvard School of Public Health, el consumo frecuente de frutas, vegetales y jugo de naranja también se asocia con una mejora en la función cognitiva subjetiva en adultos.