Marian Rojas Estapé, psiquiatra y autora de renombre, enfatiza la lectura como una herramienta esencial para mejorar nuestra capacidad de aprendizaje. Según la experta, leer no solo amplía nuestros conocimientos, sino que también tiene un impacto directo en la salud mental, ayudando a fortalecer la concentración, la memoria y el bienestar emocional.
La importancia de la lectura radica en su capacidad para expandir nuestra capacidad de aprendizaje y fomentar un desarrollo personal continuo. Rojas Estapé destaca que la lectura no solo mejora nuestras habilidades cognitivas, sino que también contribuye a reducir el estrés y la ansiedad, promoviendo un equilibrio emocional saludable. Incorporar libros en nuestra rutina diaria puede ser la clave para potenciar tanto nuestra mente como nuestra vida emocional.
Cómo la lectura mejora la concentración y la memoria activa

La lectura tiene un impacto profundo en nuestra salud mental.
La experta destaca que la lectura tiene un impacto profundo en nuestra salud mental. "Al concentrarnos en un texto, logramos calmar la mente, reducir la ansiedad y enfocar nuestra atención en el presente", afirma. De esta manera, leer no solo mejora nuestra concentración, sino que también actúa como una herramienta poderosa para el bienestar emocional.
En cuanto a sus beneficios para el cerebro, Estapé explica que “la lectura es mucho más que un hábito intelectual, es una herramienta fundamental para expandir nuestra capacidad de aprendizaje y fortalecer lo que los expertos llaman 'memoria activa o memoria de trabajo'”. Este tipo de memoria es esencial para procesar información de manera eficiente y mejorar nuestra agilidad mental.
El poder emocional de las historias

La importancia de la lectura radica en su capacidad para expandir nuestra capacidad de aprendizaje y fomentar un desarrollo personal continuo.
Marian también destaca cómo las emociones juegan un papel crucial en lo que recordamos. “Recordamos mejor aquello que nos ha hecho sentir algo”, afirma la psicóloga, explicando que cuando leemos, se activan varios sistemas en el cerebro que procesan las emociones.
En este sentido, Estapé señala que un personaje que nos conmueve o con el que nos sentimos identificados puede permanecer en nuestra memoria durante años, incluso más tiempo que datos o información aprendida de manera mecánica.