En el mundo del deporte y la salud, siempre surge la pregunta sobre cuál es el mejor camino para ganar fuerza: ¿pasar horas en el gimnasio levantando pesas o apostar por métodos alternativos? La ciencia sigue buscando respuestas y un nuevo estudio internacional acaba de encender el debate, mostrando que existen formas más accesibles de lograr los mismos beneficios sin necesidad de máquinas ni rutinas complejas.
La investigación, publicada en la revista Biology of Sport, revela que entrenar fuerza directamente sobre la bicicleta puede ser tan eficaz como hacerlo en una sala de pesas. El trabajo, en el que participó el profesor de ciclismo de la Universidad Europea de Madrid, David Barranco Gil, comparó ambos métodos y encontró que los resultados en ganancia muscular, potencia y masa libre de grasa fueron prácticamente iguales, posicionando este ejercicio en bicicleta como una alternativa real al clásico entrenamiento de fuerza.
Beneficios de entrenar fuerza sobre la bicicleta
Entrenar fuerza directamente sobre la bicicleta puede ser tan eficaz como hacerlo en una sala de pesas.
De acuerdo con Barranco, incorporar este tipo de trabajo ofrece mejoras en la potencia aplicada durante el pedaleo, en el grosor muscular del vasto lateral y en la masa libre de grasa. Lo interesante es que estas ganancias se alcanzaron sin diferencias significativas respecto a quienes realizaron sus rutinas en el gimnasio. Además, al realizarse en un gesto natural y repetitivo como la pedalada, se reduce el riesgo de errores técnicos o lesiones comunes cuando se usan pesas sin supervisión.
El especialista enfatiza que no se trata de reemplazar totalmente el gimnasio, sino de entender que la bicicleta puede convertirse en una herramienta de fuerza igualmente válida. Así, tanto ciclistas profesionales como personas que pedalean por recreación o salud pueden aprovechar este método. Eso sí, recomienda hacerlo con una bicicleta en buen estado y con una progresión gradual, para garantizar resultados sostenibles y seguros.
Un entrenamiento accesible y seguro
La bicicleta puede convertirse en una herramienta de fuerza igualmente válida.
Uno de los puntos más destacados de la investigación es la seguridad. Ningún participante abandonó el estudio por molestias o lesiones, lo que refuerza la aplicabilidad de este protocolo incluso en contextos no profesionales. Según Barranco, si bien no se midió la prevención de lesiones de manera directa, la ausencia de efectos secundarios es una señal positiva para su implementación.
Esto convierte al ejercicio en bicicleta en una alternativa real y alcanzable para quienes no siempre tienen tiempo o recursos para ir al gimnasio. En un país como el nuestro, donde muchos buscan rutinas sencillas y de bajo costo, entrenar fuerza sobre la bici podría ser la respuesta ideal para mejorar la resistencia física y mantener un estilo de vida saludable.
