La postura de yoga que ayuda a bajar de peso.
La postura de yoga que ayuda a bajar de peso. Arhanta Yoga Ashrams

Postura de la langosta: el asana de yoga que ayuda a bajar de peso y tonificar el cuerpo

|18 agosto 2025

El yoga es mucho más que una práctica para liberar el estrés o reconectarnos con nuestro interior. Aunque muchos lo asocian solo con la relajación, lo cierto es que sus posturas también ofrecen beneficios físicos concretos, como fortalecer músculos, mejorar la postura y tonificar el cuerpo.

Un claro ejemplo es la postura de la langosta, conocida en sánscrito como Salabhasana. Este asana es considerado uno de los más efectivos para quienes buscan bajar de peso y trabajar varias zonas al mismo tiempo, ya que fortalece brazos, glúteos, piernas y espalda, mientras ayuda a reducir grasa abdominal.

Beneficios de la postura de langosta

La postura de la langosta activa los músculos posturales del abdomen y la espalda.

La postura de la langosta activa los músculos posturales del abdomen y la espalda.

Según un artículo de la revista UNO, la postura de la langosta activa los músculos posturales del abdomen y la espalda, además de liberar tensión en la zona pélvica. También estimula los nervios parasimpáticos de la columna y refuerza la resistencia en la parte posterior del torso. En conjunto, estos efectos permiten no solo tonificar, sino también acelerar la quema de grasa, contribuyendo a estilizar la cintura.

Este asana es apto para principiantes y puede realizarse en casa con una esterilla. Su práctica constante ofrece múltiples beneficios, entre ellos mayor flexibilidad, mejor circulación y fortalecimiento de glúteos y piernas.

Cómo hacer la postura de la langosta (Salabhasana) paso a paso

La postura de la langosta o Salabhasana ayuda a tonificar glúteos, brazos y piernas, y es ideal para incluir en tu rutina de yoga en casa.

La postura de la langosta o Salabhasana ayuda a tonificar glúteos, brazos y piernas, y es ideal para incluir en tu rutina de yoga en casa.

  1. Inicia con media postura, levantando una pierna a la vez sin flexionar las rodillas.
  2. Una vez dominado el movimiento, eleva ambas piernas simultáneamente lo más alto posible.
  3. Mantén los hombros y brazos empujando hacia el suelo, sin levantarlos.
  1. Conserva siempre las caderas apoyadas y las piernas rectas para evitar lesiones.
  2. Controla la respiración: inhala al elevar las piernas y exhala al descender lentamente.
  3. Repite varias veces el ejercicio para fortalecer músculos, mejorar la resistencia y favorecer la quema de grasa.