Diversos estudios recientes han demostrado que el ejercicio no solo mejora la calidad de vida de los pacientes, sino que también contribuye significativamente a la recuperación y la prevención de la recaída en quienes han sido diagnosticados con cáncer de colon. Según una investigación presentada en la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO) y publicada en el New England Journal of Medicine, los sobrevivientes que participaron en programas estructurados de actividad física mostraron una reducción notable en la recurrencia del cáncer y en la mortalidad general.
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Este estudio, realizado en varios países como Canadá, Australia, Reino Unido, Israel y Estados Unidos, es el primero en demostrar de forma aleatoria y controlada el efecto positivo del ejercicio en pacientes con cáncer de colon tras completar su tratamiento de quimioterapia. Como afirma la doctora Julie Gralow, directora médica de ASCO, "esta es la evidencia de la más alta calidad que se puede obtener" para respaldar la importancia de la actividad física en la recuperación oncológica.
¿Por qué el ejercicio es clave en la recuperación del cáncer de colon?
El ejercicio físico puede reducir el riesgo de recaída en pacientes con cáncer de colon.
Según el doctor Christopher Booth, oncólogo del Centro de Ciencias de la Salud de Kingston, Ontario, el programa de ejercicio supervisado que incluyó entrenadores personales logró que los pacientes aumentaran su actividad física durante años, obteniendo un 28% menos de recurrencias de cáncer y una reducción del 37% en muertes por cualquier causa. Esto confirma que el ejercicio es una intervención asequible y efectiva para mejorar la supervivencia y la salud general de los pacientes.
Los investigadores también indagaron en posibles mecanismos biológicos que expliquen este beneficio, como la mejora en el procesamiento de insulina y el fortalecimiento del sistema inmunológico, aunque aún se requieren más estudios para comprenderlo a fondo. Sin embargo, queda claro que motivar a los pacientes a mantenerse activos, con apoyo profesional y social, puede marcar una gran diferencia en su proceso de recuperación del cáncer.
Cómo integrar el ejercicio en el cuidado de pacientes con cáncer de colon
Caminar con regularidad es una de las actividades más recomendadas durante la recuperación de cáncer de colon.
El programa de entrenamiento propuesto incluyó sesiones regulares con entrenadores que ayudaban a los pacientes a incorporar caminatas y otras actividades físicas en su rutina diaria, haciendo que el ejercicio fuera accesible y disfrutable. Terri Swain-Collins, una paciente de 62 años que participó en el estudio, comenta que el apoyo continuo y la motivación fueron claves para mantener su compromiso y mejorar su bienestar general.
Las autoridades sanitarias y expertos en oncología recomiendan que los centros de cáncer y planes de seguro consideren el ejercicio como un estándar de atención para los sobrevivientes de cáncer de colon, dado su potencial para prevenir la recurrencia y aumentar la calidad de vida. Mientras tanto, los pacientes pueden empezar a aumentar su actividad física después del tratamiento con la certeza de estar haciendo una contribución activa a su salud.
