La luxación de tobillo con fractura de peroné es una lesión compleja, según expertos.
La luxación de tobillo con fractura de peroné es una lesión compleja, según expertos. Composición LR

¿Qué es una luxación de tobillo con fractura de peroné? El tipo de lesión que sufrió Jamal Musiala en el Mundial de Clubes

|07 julio 2025

Una luxación de tobillo acompañada de fractura de peroné representa una de las lesiones más graves dentro del ámbito deportivo. Esta afección se produce cuando la articulación del tobillo se desplaza de forma violenta y, al mismo tiempo, el peroné, uno de los huesos de la pierna, se fractura. El resultado es un cuadro de dolor intenso y una recuperación que suele ser larga y compleja. Al tratarse de una urgencia médica, requiere atención inmediata para evitar complicaciones futuras y posibles secuelas funcionales en la movilidad del paciente.

Un ejemplo reciente de este tipo de lesión es el del futbolista Jamal Musiala, quien sufrió esta grave combinación en plena competencia. Su caso ha reavivado la atención sobre este tipo de traumatismo frecuente en disciplinas de alto impacto, como el fútbol, el rugby o el atletismo. Pero, ¿en qué consiste realmente esta lesión, por qué ocurre y qué implica su tratamiento? Aquí te lo explicamos.

¿Qué es una luxación de tobillo con fractura de peroné?

Una fractura de peroné no pasa desapercibida. El síntoma más característico es un dolor intenso en la parte lateral del tobillo, que suele aparecer de forma inmediata tras el impacto o torcedura. A este dolor se suma una evidente inflamación en la zona lesionada, que puede venir acompañada de hematomas, edema e incluso una deformidad visible en la articulación, especialmente cuando hay una luxación de tobillo asociada.

La fractura de peroné suele producirse tras una torcedura violenta del tobillo.

La fractura de peroné suele producirse tras una torcedura violenta del tobillo.

En algunos casos, el paciente también puede experimentar entumecimiento o alteración sensitiva, lo que indica que el daño podría estar afectando no solo a la estructura ósea, sino también a los nervios periféricos. Esta combinación de síntomas requiere atención médica urgente, ya que puede comprometer la movilidad de manera significativa si no se trata adecuadamente.

¿Por qué ocurre esta lesión y cómo se trata?

La fractura de peroné suele producirse tras una torcedura violenta del tobillo, como ocurre con frecuencia en deportes como el fútbol, baloncesto o artes marciales. Una mala caída, un golpe directo, o incluso el exceso de fuerza durante una luxación de tobillo pueden romper el hueso. Además, existen factores de riesgo que aumentan la probabilidad de sufrir esta lesión, como el consumo excesivo de alcohol, problemas de equilibrio o caminar en superficies inestables.

El tratamiento de la fractura de peroné puede ser conservador, con yeso o férula durante seis a ocho semanas.

El tratamiento de la fractura de peroné puede ser conservador, con yeso o férula durante seis a ocho semanas.

Ante una posible fractura, el primer paso es acudir al médico. El diagnóstico incluye un examen físico, preguntas sobre cómo ocurrió la lesión, y pruebas de imagen como radiografías o resonancias magnéticas. El tratamiento de la fractura de peroné puede ser conservador, con yeso o férula durante seis a ocho semanas, o quirúrgico si hay fragmentos desplazados, fractura abierta o inestabilidad severa. En estos casos se usan placas y tornillos para estabilizar el hueso.

Sea cual sea el tipo de intervención, la recuperación no está completa sin un adecuado proceso de fisioterapia, clave para restaurar la movilidad y fuerza de la pierna afectada. El trabajo del fisioterapeuta puede iniciarse incluso durante la inmovilización, y continúa después de retirar el yeso o pasar por cirugía, con ejercicios específicos para recuperar el control y la funcionalidad del tobillo.