El dolor en las articulaciones afecta a millones de personas en el mundo, especialmente a partir de los 40 años. Factores como el envejecimiento, el sobrepeso, enfermedades como la artritis o incluso el sedentarismo pueden desencadenar molestias en rodillas, codos, muñecas y caderas.
Frente a esto, expertos en nutrición y bienestar están apostando por remedios naturales, entre ellos una bebida sencilla pero poderosa: el jugo de cúrcuma con jengibre. Esta combinación, además de ser accesible, tiene efectos comprobados contra la inflamación, una de las principales causas del dolor articular.
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Cúrcuma y jengibre: una dupla poderosa
Según algunos estudios, tanto la cúrcuma como el jengibre contienen compuestos con propiedades antiinflamatorias naturales. La cúrcuma, en particular, es rica en curcumina, un antioxidante que, de acuerdo con publicaciones de la Mayo Clinic, puede reducir la inflamación crónica y aliviar los síntomas en pacientes con artritis reumatoide u osteoartritis.
Por su parte, el jengibre contiene gingerol, otro agente bioactivo con efectos similares que también puede disminuir la rigidez matutina y mejorar la movilidad articular.
Respaldo científico y nutricional
Estudios clínicos publicados en revistas como Phytotherapy Research han demostrado que el consumo regular de extractos de cúrcuma puede ser tan eficaz como ciertos medicamentos antiinflamatorios, pero sin los efectos secundarios adversos. Nutricionistas recomiendan incluir esta bebida como parte de una dieta antiinflamatoria, acompañada de frutas ricas en antioxidantes y ácidos grasos omega-3.
Además, esta infusión no solo alivia el dolor articular, sino que fortalece los huesos, gracias a su capacidad para mejorar la absorción de nutrientes esenciales como el calcio y la vitamina D, especialmente cuando se consume con una pizca de pimienta negra, que potencia la biodisponibilidad de la curcumina.
Incluir bebidas naturales en tu dieta podría ayudarte a mejorar la digestión. Foto: composición GLR/difusión
¿Cómo preparar esta bebida natural en casa?
Ingredientes:
- 1 taza de agua caliente
- 1 cucharadita de cúrcuma en polvo
- 1 cucharadita de jengibre rallado fresco (o en polvo)
- 1 pizca de pimienta negra
- Jugo de medio limón (opcional)
- Miel al gusto
Preparación: Hervir el agua con el jengibre y la cúrcuma durante unos 5 minutos. Retirar del fuego, añadir la pimienta, el limón y la miel. Consumir en ayunas o antes de dormir.
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Bienestar a largo plazo
Aunque esta bebida no sustituye tratamientos médicos, su uso constante puede ser un complemento eficaz para quienes buscan aliviar el dolor articular, fortalecer los huesos y mejorar su calidad de vida de forma natural. Siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de incorporar suplementos o remedios naturales, especialmente si ya se está bajo tratamiento.
