Con el paso de los años, el tiempo personal se vuelve cada vez más limitado debido a las múltiples responsabilidades y tareas diarias que se acumulan. Encontrar momentos libres para dedicarlos al cuidado propio se vuelve un verdadero desafío en medio del ajetreo cotidiano.
Sin embargo, una investigación reciente publicada en SportRxiv, confirma que no es necesario invertir largas horas en el gimnasio para obtener beneficios. Realizar sesiones cortas de entrenamiento de fuerza puede ser igual de efectivo para mejorar la salud y el rendimiento físico, demostrando que la calidad y la constancia pesan más que la duración del ejercicio.
¿Por qué levantar más peso en menos tiempo?
El estudio, aún en fase preimpresa, analizó múltiples investigaciones sobre el impacto del volumen de entrenamiento en la ganancia muscular. Los resultados mostraron que realizar solo una o dos series intensas con pesas pesadas puede generar mejoras significativas en fuerza. Aunque entrenar con muchas series también ofrece beneficios, estos tienden a estabilizarse después de cierto punto.

Realizar sesiones cortas de entrenamiento de fuerza puede ser igual de efectivo para mejorar la salud y el rendimiento físico.
Especialistas como Albert Matheny explican que levantar más peso en menos repeticiones estimula mejor los músculos, favoreciendo el crecimiento de masa muscular magra. Esto permite obtener resultados más visibles sin necesidad de rutinas largas ni extenuantes.
¿Cómo elegir el peso ideal para entrenar?
Uno de los errores más comunes es no saber con qué peso empezar. La recomendación general es trabajar con una carga que permita completar entre 8 y 12 repeticiones por serie, manteniendo una buena técnica. Si superas ese rango con facilidad, es momento de subir el peso; si no llegas, prueba con una carga menor.
Este enfoque no solo mejora el rendimiento, sino que también optimiza el tiempo de entrenamiento, ideal para quienes tienen agendas apretadas. Probar diferentes niveles de peso y observar tu capacidad de ejecución es una forma efectiva de identificar tu punto de partida.

Uno de los errores más comunes es no saber con qué peso empezar.
¿Con qué frecuencia hacer entrenamiento de fuerza?
La frecuencia también es un factor clave. El estudio coincide con las recomendaciones oficiales de realizar al menos dos sesiones semanales de ejercicio de fuerza. Esto puede combinarse con otros tipos de actividad física como cardio o movilidad. Para quienes buscan avanzar más rápido, se puede entrenar todos los días alternando grupos musculares.
Además de mejorar el rendimiento, el entrenamiento con pesas fortalece huesos, acelera el metabolismo y mejora la salud general. Lo importante es ser constante y adaptar la rutina a tu realidad, sin necesidad de rutinas eternas ni sobrecarga.