Pamela López abrió las puertas de su hogar al programa ‘Día D’, mostrando cómo ha reorganizado su vida tras su separación del futbolista Christian Cueva. Desde tempranas horas del día, ella asume sola todas las responsabilidades del hogar: prepara las loncheras, organiza los uniformes y acompaña a sus hijos al colegio. Durante el reportaje, sus pequeños no solo expresaron admiración por su madre, sino que también compartieron, por primera vez en televisión, detalles de su vínculo con su padre. Lejos de las cámaras, este testimonio refleja una realidad que muchas mujeres viven diariamente, marcada por el esfuerzo constante y el amor incondicional.
¿Qué significa ser madre soltera en la actualidad?
Ser madre sin una pareja no solo implica asumir la crianza de los hijos; también supone enfrentarse a una sociedad que todavía impone estándares familiares tradicionales. Si bien el estigma ha disminuido, como lo señalan investigaciones recientes citadas por Schmidt, Shore-Sheppard y Watson (NHIS 2016–2018), el 32% de las madres solteras reporta niveles moderados o severos de angustia psicológica. Este porcentaje supera ampliamente al de madres casadas, lo cual evidencia una sobrecarga emocional derivada, en parte, de la precariedad económica, el juicio social y la falta de redes de apoyo.

Ser madre soltera es enfrentarse a una sociedad que todavía impone estándares familiares tradicionales.
1. Sobrecarga de responsabilidades y cansancio constante
Una madre soltera suele desempeñar todos los roles dentro del hogar. No solo debe asegurar el sustento económico, sino también encargarse de la crianza, la educación y el cuidado emocional de los hijos. La falta de una figura que comparta estas obligaciones produce desgaste físico y mental. El caso de Pamela López evidencia cómo, pese al cansancio, muchas mujeres siguen adelante motivadas por el bienestar de sus hijos.
2. Aislamiento social
En los primeros años de maternidad, es común que el tiempo personal se reduzca al mínimo. Esta situación se agrava cuando no hay un adulto con quien compartir tareas o conversar. El aislamiento emocional puede impactar la salud mental de forma severa. Muchas madres solteras afirman sentirse solas, sin espacios para interactuar con otros adultos ni momentos de respiro para ellas mismas.
3. Dependencia de la familia: ¿apoyo o interferencia?
En ausencia de una pareja, algunas mujeres deben apoyarse en su familia extensa para poder cumplir con sus obligaciones. Sin embargo, este soporte no siempre es equilibrado. A veces, los familiares asumen decisiones que solo le corresponden a la madre, lo cual puede generar conflictos y desautorización. Este tipo de intromisión afecta la autonomía materna y debilita su autoridad frente a los hijos.
4. La culpa
Entre los sentimientos más frecuentes en las madres solteras se encuentran la ansiedad, el estrés, la tristeza y, sobre todo, la culpa. Muchas se cuestionan si sus hijos resentirán la ausencia de la figura paterna o si podrán ofrecerles una infancia plena. Esta carga emocional puede incrementarse cuando el entorno social emite juicios que invalidan sus decisiones o su modelo familiar.
¿Cómo mejorar el bienestar de una madre soltera?
Crear redes de apoyo, buscar orientación profesional y permitir espacios de autocuidado son algunos de los caminos para aliviar el peso emocional. Pero, además, la sociedad necesita ofrecer condiciones más justas para estas familias. Políticas públicas, entornos laborales flexibles y una mirada inclusiva son fundamentales para que las madres solteras puedan vivir su maternidad de forma plena, sin sentirse cuestionadas ni solas.