La reciente disputa entre Jefferson Farfán y Melissa Klug por la pensión de alimentos ha vuelto a poner sobre la mesa el impacto emocional que generan este tipo de conflictos legales. Según lo revelado en el programa "Ponte en la cola", una sentencia judicial ordena al exfutbolista cumplir con un elevado pago en dólares, lo que ha desatado reacciones en redes y medios.
Más allá de lo mediático, este caso ilustra cómo los procesos legales de familia; como el de pensión de alimentos, la custodia por los hijos o el divorcio; no solo afectan la situación económica, sino también el bienestar emocional y psicológico de las personas involucradas, generando estrés, ansiedad y tensiones familiares prolongadas.
El impacto emocional de las disputas por pensión de alimentos

Los procesos legales de familia, como la pensión de alimentos, pueden generar un fuerte impacto emocional a todas las partes.
Los conflictos familiares, como la disputa por pensión de alimentos, suelen estar cargados de emociones intensas debido a que involucran directamente la manutención de los hijos y la relación entre exparejas. Como lo señala el portal especializado LawUp Abogados, enfrentar audiencias, esperar resoluciones y lidiar con incumplimientos puede provocar altos niveles de estrés y ansiedad. Incluso, cuando se trata de montos elevados, como el caso de Farfán y Klug, las presiones financieras y mediáticas pueden amplificar el desgaste emocional
El resentimiento, la frustración y la incertidumbre sobre el futuro son comunes. Expertos en salud mental recomiendan establecer una comunicación clara y respetuosa, así como mantener registros precisos de pagos y acuerdos. Además, recurrir a la mediación o asesoría legal puede reducir el enfrentamiento directo y ayudar a preservar la estabilidad emocional de todas las partes involucradas.
Estrategias para proteger la salud mental en medio de un proceso legal

Las disputas familiares pueden afectar la salud mental y el bienestar de todos los involucrados.
En disputas por pensión de alimentos, es fundamental priorizar el bienestar emocional, especialmente cuando hay hijos involucrados. Buscar apoyo en familiares, amigos o profesionales de la salud mental ayuda a sobrellevar la carga psicológica. Mantener una rutina estable, practicar técnicas de manejo del estrés, como meditación o actividad física, y evitar las discusiones en redes sociales son pasos clave para reducir el impacto.
También es importante separar la relación personal del proceso legal, evitando que los desacuerdos afecten la convivencia o el vínculo con los hijos. En muchos casos, contar con un abogado especializado en derecho de familia permite aliviar la presión y enfocarse en soluciones a largo plazo.