¿Por qué muchas personas dejan las cáscaras de mandarina en sus ventanas y puertas? Conoce este gran truco
¿Por qué muchas personas dejan las cáscaras de mandarina en sus ventanas y puertas? Conoce este gran truco

¿Por qué muchas personas dejan las cáscaras de mandarina en sus ventanas y puertas? Conoce este gran truco

|26 julio 2025

En varios hogares de países de Latinoamérica, resurgió una costumbre muy efectiva: dejar cáscaras de mandarina cerca de las aberturas. ¿El motivo? Sus aceites esenciales funcionan como un repelente natural que mantiene lejos a mosquitos, hormigas y otros insectos comunes.

No se trata de una creencia sin base, la piel de esta fruta contiene compuestos naturales que, además de ahuyentar plagas, liberan un aroma fresco que mejora el ambiente del hogar.

Cáscara de mandarina: mucho más que un simple residuo

Generalmente se desechan, pero las cáscaras de mandarina pueden convertirse en una solución ecológica, accesible y útil. Al colocarlas en platitos pequeños cerca de puertas y ventanas, no solo actúan como insecticida natural, sino que también perfuman los espacios de manera agradable.

Incluso cuando se secan, estas cáscaras siguen desprendiendo su característico olor cítrico por varios días. Y lo mejor: sin necesidad de aerosoles ni ambientadores químicos.

Este truco casero no solo ahuyenta insectos y deja buen aroma. También te ayuda a reutilizar un desecho, reduciendo la basura doméstica. Es ideal para quienes buscan alternativas sustentables y económicas para el hogar.

Además, según nutricionistas, la mandarina en sí es una fruta altamente beneficiosa para la salud: fortalece el sistema inmunológico, favorece la digestión por su alto contenido de fibra, mejora la piel gracias a sus antioxidantes y colabora con la salud cardiovascular.

Cáscara de mandarina

Las cáscaras de mandarina pueden convertirse en una solución ecológica.

¿Qué propiedades tiene la cáscara de mandarina?

La cáscara contiene limoneno, un aceite esencial con poder repelente, y compuestos aromáticos que actúan como desodorante ambiental. Según expertos en salud natural, estos componentes tienen efectos antimicrobianos y pueden contribuir a un entorno más limpio y saludable, sin exposición a químicos. Asimismo, el aroma cítrico está asociado con una sensación de frescura y limpieza, lo que influye positivamente en el estado de ánimo.

Cómo usar la cáscara de mandarina correctamente en casa

Coloca las cáscaras frescas en recipientes cerca de ventanas, puertas o cualquier abertura donde puedan ingresar insectos. Déjalas ahí hasta que se sequen completamente. Si quieres intensificar el efecto, puedes combinarlas con clavos de olor o eucalipto. También es posible rallarlas y mezclarlas con bicarbonato para crear un desodorante ecológico en armarios y baños.