Cómo cambia el sueño después de los 60 y qué hacer para lograr un descanso reparador
Cómo cambia el sueño después de los 60 y qué hacer para lograr un descanso reparador

Cómo cambia el sueño después de los 60 y qué hacer para lograr un descanso reparador

|15 julio 2025

A partir de los 60 años, muchas personas notan que duermen menos, se despiertan con frecuencia o no logran descansar como antes. Este cambio puede deberse a múltiples factores, tanto físicos como emocionales. La buena noticia es que existen formas efectivas de mejorar la calidad del sueño y recuperar el bienestar nocturno.

¿Qué pasa con el sueño después de los 60 años?

Según el portal MedlinePlus, de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los patrones de sueño tienden a modificarse con el paso de los años. Dormir puede volverse más difícil, los despertares nocturnos se hacen frecuentes y es común levantarse más temprano. Además, trastornos como el insomnio y la apnea del sueño se vuelven más habituales, tal como advierte el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento (NIA).

La doctora Stella Maris Valiensi, neuróloga y autora del libro La ruta del sueño, explica que los cambios en el descanso comienzan incluso antes de los 60. “Factores como la menopausia, el retiro laboral, dolores físicos o pérdidas emocionales pueden alterar el sueño si no se incorporan rutinas saludables”, comenta. Por su parte, la psiquiatra Myriam Monczor, especialista en adultos mayores, agrega que el sueño se vuelve más superficial con el tiempo, lo que facilita los despertares por cualquier molestia, como el dolor.

Dormir puede volverse más difícil cuando pasan los 60 años.

Dormir puede volverse más difícil cuando pasan los 60 años.

¿Cuántas horas conviene dormir a esta edad?

Ambas expertas coinciden en que, en promedio, se recomienda dormir entre 6 y 7 horas. Sin embargo, lo importante no es la cantidad exacta, sino cómo se siente la persona al despertar. “Cada uno tiene un número de horas ideal que le permite enfrentar el día con energía”, afirma Valiensi. También es común tener la necesidad de una siesta breve tras el almuerzo, pero no debe superar los 30 a 40 minutos para no afectar el descanso nocturno.

La doctora Monczor indica que si el insomnio afecta el ánimo, la concentración o las actividades diarias, es recomendable acudir a un profesional. En muchos casos, los problemas para dormir están asociados a situaciones emocionales, enfermedades o efectos de medicamentos, por lo que es clave buscar el origen del trastorno.

Consejos para dormir mejor después de los 60

Las doctoras Valiensi y Monczor recomiendan seguir estas pautas para mejorar el descanso:

  • Acostarse y levantarse todos los días a la misma hora.
  • Evitar pantallas, luces fuertes y ruidos antes de dormir.
  • No consumir café ni alcohol en la tarde o noche.
  • Hacer ejercicio en la mañana o al mediodía.
  • Evitar siestas largas.
  • Crear un ambiente propicio: habitación oscura, cómoda y fresca.
  • Si no se concilia el sueño en 30 minutos, levantarse, relajarse y volver a intentarlo.
  • No tomar medicamentos sin prescripción médica.

Dormir bien es posible, incluso en la adultez mayor. Lo fundamental es conocer los cambios normales del cuerpo y adoptar hábitos que favorezcan un descanso verdaderamente reparador.