La ciencia ha dado un paso extraordinario para las personas que han perdido la capacidad de hablar. Un equipo de neurocientíficos en la Universidad de California en Davis ha desarrollado una innovadora tecnología que permite transformar señales cerebrales en palabras audibles en tiempo real. Este hito abre una nueva esperanza para pacientes con enfermedades neurodegenerativas como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
El proyecto se centra en el caso de Casey Harrell, un paciente que, tras años sin poder comunicarse verbalmente por los efectos de la ELA, logró recuperar su "voz" gracias a un neuroimplante. Esta tecnología, descrita como un avance sin precedentes por National Geographic, permite traducir la actividad cerebral directamente en audio, marcando una revolución en el campo de la neurociencia aplicada.
La tecnología que convierte pensamientos en palabras audibles
Casey Harrell perdió la capacidad de hablar a los 42 años debido al deterioro progresivo provocado por la ELA. Aunque ya no podía mover los músculos necesarios para el habla, su cerebro seguía generando las señales que antes usaba para comunicarse. Este hallazgo fue clave para que el equipo liderado por el doctor Sergey Stavisky pudiera intervenir.
Neurocientíficos trabajan en implantes cerebrales que permiten recuperar la comunicación en pacientes con ELA.
A través de una cirugía, los científicos implantaron 256 electrodos en la zona del cerebro encargada del movimiento. Estos dispositivos permitieron registrar las señales neuronales cada vez que Casey intentaba hablar. Con apenas 30 minutos de entrenamiento, el sistema logró interpretar esas señales y transformarlas en palabras con un 97% de precisión.
Un cambio en la forma de comunicarse
Inicialmente, las palabras generadas por el sistema aparecían en pantalla, pero el proceso aún era lento. Esto motivó al equipo a desarrollar una nueva versión más rápida y eficaz. Gracias a algoritmos avanzados de predicción neuronal, lograron reducir el tiempo de procesamiento a tan solo 25 milisegundos, permitiendo una comunicación oral más fluida y natural.
Casey ahora puede modular su entonación y enfatizar ciertas palabras, haciendo su voz artificial mucho más expresiva. Además, continúa perfeccionando su uso con ayuda del equipo de investigación.
Una tecnología que brinda esperanza
El nuevo sistema traduce señales cerebrales en palabras audibles, abriendo una nueva era en la neurocomunicación.
Los responsables del proyecto destacan que este avance no solo representa una mejora tecnológica, sino también una profunda transformación emocional y social. “Recuperar la voz es recuperar parte de la identidad”, explicó David Brandman, codirector del laboratorio y cirujano encargado del implante.
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La tecnología, actualmente en desarrollo, tiene el potencial de beneficiar a otros pacientes con ELA, así como a personas que han sufrido accidentes cerebrovasculares u otras lesiones neurológicas severas. El objetivo final es devolverles la posibilidad de comunicarse y reconectarse con su entorno.
