Las enfermedades venosas crónicas, como las várices y las arañas vasculares, afectan a millones de personas en todo el mundo, en especial a mujeres mayores de 30 años. En la búsqueda de alternativas naturales, un grupo de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha puesto el foco en una planta medicinal con alto potencial terapéutico: la centella asiática.
Esta hierba, también conocida como gotu kola, ha sido objeto de estudios científicos por sus propiedades antiinflamatorias, vasoprotectoras y cicatrizantes. De acuerdo con especialistas de la UNAM, se destaca su eficacia para mejorar la circulación y fortalecer las paredes de las venas, lo que la convierte en una aliada natural contra las várices y las venas varicosas.
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¿Qué son las várices y por qué aparecen?
Las várices se producen cuando las venas, especialmente en las piernas, pierden su capacidad para bombear la sangre de regreso al corazón. Esto provoca hinchazón, dolor, calambres y, en algunos casos, complicaciones más graves. Las causas son múltiples: predisposición genética, sedentarismo, obesidad, embarazos y envejecimiento.
Las arañas vasculares, por su parte, son dilataciones superficiales de pequeños vasos sanguíneos que, aunque menos severas, también generan incomodidad estética y molestias leves.
Centella asiática: ¿cómo actúa esta planta medicinal?
Investigaciones científicas, como las publicadas en el Journal of Ethnopharmacology, respaldan el uso de centella asiática por su capacidad de estimular la producción de colágeno, mejorar la elasticidad de las venas y disminuir la inflamación. Su contenido de triterpenos ayuda a mejorar el retorno venoso, reduciendo la hinchazón y la sensación de pesadez en las piernas.
El equipo de la UNAM ha señalado que el uso regular de extractos naturales de esta planta, ya sea en infusión, cápsulas o cremas tópicas, puede mejorar notablemente la sintomatología de los pacientes con enfermedades venosas leves a moderadas.
Evidencia científica y respaldo universitario
El respaldo de la UNAM a esta alternativa natural ha impulsado el interés público y académico. Los investigadores enfatizaron que los tratamientos con centella asiática deben considerarse un complemento, no un reemplazo de la atención médica profesional, especialmente en casos severos.
Estudios adicionales en universidades de Europa y Asia coinciden en los beneficios de esta planta, que también ha sido utilizada en la medicina tradicional india y china durante siglos.
Conoce cómo la centella asiática puede ayudarte en tu lucha contra las várices.
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Prevención y hábitos saludables
Además del uso de fitoterapia, los especialistas recomiendan mantener un estilo de vida activo, evitar estar de pie o sentado por largos períodos, usar medias de compresión si es necesario y mantener un peso saludable.
La centella asiática se perfila como una herramienta accesible y eficaz para quienes buscan prevenir o aliviar los síntomas de las várices sin recurrir de inmediato a procedimientos invasivos.
