Mantener una memoria aguda a cualquier edad es uno de los mayores retos del bienestar actual. Según un estudio publicado por la Universidad de Harvard, un método natural y accesible podría ser la clave para preservar las funciones cognitivas y reducir el riesgo de enfermedades como el Alzheimer.
La investigación, difundida en The Journal of Prevention of Alzheimer’s Disease, destaca que la actividad física regular, combinada con una alimentación rica en antioxidantes y contacto social frecuente, contribuye a una memoria más fuerte.
“Caminar a diario, mantener conversaciones estimulantes y llevar una dieta balanceada son pilares esenciales para el cerebro”, afirmaron los especialistas de Harvard.
La conexión entre cuerpo, mente y salud
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España respalda estas recomendaciones, señalando que una rutina de ejercicio moderado favorece la oxigenación cerebral y la creación de nuevas conexiones neuronales.
Cuidar la mente es un proceso integral, según Harvard. Foto: composición GLR/difusión
Además, según la publicación del New York Times, incluso los hábitos de cuidado personal —como el uso de desodorantes naturales sin disruptores endocrinos— pueden tener un impacto indirecto en el bienestar general, incluyendo la salud cerebral.
Evitar la exposición constante a compuestos como los parabenos y los ftalatos, presentes en algunos productos convencionales, podría disminuir la carga tóxica en el organismo y favorecer procesos biológicos más equilibrados.
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La edad también importa: cambios que debes conocer
Un estudio citado por La Nación reveló que el olor corporal comienza a cambiar alrededor de los 40 años, debido a variaciones en la composición química de la piel. Estos cambios están relacionados con el metabolismo y, aunque parecen alejados de la memoria, son señales de las transformaciones naturales del cuerpo que también afectan la salud cerebral.
Adoptar hábitos saludables de forma temprana es clave. Como destaca Harvard, cuidar la mente es un proceso integral que empieza mucho antes de la vejez. Incorporar ejercicio, alimentación saludable y minimizar toxinas puede ser, sin duda, el verdadero secreto de una memoria de hierro.
