El VIH, o virus de inmunodeficiencia humana, ataca las defensas del cuerpo y, sin tratamiento, puede evolucionar hacia el SIDA, la etapa más avanzada de la infección. Aunque los avances médicos han mejorado la calidad de vida de las personas con VIH, los jóvenes siguen siendo uno de los grupos con mayor riesgo de contagio.
Según el sitio oficial del NIH (Instituto Nacional de Salud de EE.UU.), muchas personas no presentan síntomas inmediatos después de la infección, lo que dificulta su detección temprana. Sin embargo, algunos signos pueden aparecer semanas después de la exposición, como fiebre, fatiga, erupciones cutáneas y dolor de garganta.

Conocer las señales y tomar medidas preventivas es fundamental, especialmente entre adolescentes y adultos jóvenes. Foto: NIH
Síntomas que no debes pasar por alto
Identificar estos síntomas puede ser clave para un diagnóstico temprano:
- Fiebre persistente
- Sudores nocturnos
- Pérdida de peso sin causa aparente
- Inflamación de ganglios linfáticos
- Fatiga extrema
Estos síntomas suelen confundirse con otras enfermedades, por lo que una prueba de detección es fundamental si se ha estado expuesto a situaciones de riesgo, como relaciones sexuales sin protección o el uso compartido de agujas.
Nuevas investigaciones y prevención
La inmunóloga Akiko Iwasaki, de la Universidad de Yale, ha destacado recientemente en una entrevista con The New York Times la necesidad de crear vacunas que no solo protejan del VIH, sino también de otros virus que afectan al sistema inmunológico, como el Epstein-Barr, que podría estar relacionado con enfermedades autoinmunes y la esclerosis múltiple.
Mientras los avances científicos continúan, las medidas de prevención siguen siendo cruciales:
- Uso correcto del preservativo
- Acceso a la profilaxis preexposición (PrEP)
- Educación sexual integral
- Realización periódica de pruebas de VIH
Un diagnóstico no es una sentencia
Con tratamiento antirretroviral (TAR), las personas con VIH pueden llevar una vida larga y saludable. Además, si el virus está controlado y se mantiene una carga viral indetectable, el riesgo de transmisión se reduce a casi cero, según el NIH.
Hablar sobre el VIH, romper el estigma y fomentar el acceso a la información y los servicios de salud es esencial para reducir el contagio del VIH en 2025 y más allá.