Beber un vaso al día de agua de perejil se está convirtiendo en un secreto casero muy popular para mejorar la salud del hígado y regular los niveles de colesterol. Esta bebida natural destaca por su capacidad antioxidante y depurativa, ideal para quienes buscan alternativas no farmacológicas para tratar el hígado graso.
Según la nutricionista Karla Padilla, el perejil contiene flavonoides como la apigenina y luteolina, que favorecen la eliminación de toxinas y protegen al hígado contra la inflamación. Además, su alto contenido en vitamina C potencia la función inmunológica y actúa como un escudo contra el daño oxidativo.
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Estudios respaldan su eficacia
Diversas investigaciones científicas han explorado el impacto del perejil en la salud hepática. Un estudio publicado en The Journal of Medicinal Food encontró que extractos de perejil reducen significativamente la acumulación de grasa en el hígado de modelos animales, mejorando también los perfiles de colesterol.
Por su parte, investigadores de la Universidad de Ciencias Médicas de Irán destacaron en 2021 que el consumo regular de agua de perejil puede contribuir a disminuir los niveles de triglicéridos y LDL (colesterol "malo") en personas con dislipidemias, reforzando así su fama como un efectivo remedio natural.
Cómo preparar el secreto casero
Preparar este secreto casero es sencillo: solo necesitas hervir un manojo de perejil fresco en un litro de agua, dejar reposar y filtrar. Se recomienda consumir un vaso al día, preferentemente en ayunas, para maximizar sus beneficios sobre el hígado graso y el colesterol.
La doctora Beatriz Zepeda, especialista en medicina natural, sugiere complementar este hábito con una alimentación equilibrada y la práctica regular de ejercicio. "No hay fórmulas mágicas, pero pequeños cambios como este pueden marcar la diferencia en nuestra salud hepática", afirma.
Antes de incluir el agua de perejil regularmente en tu dieta consulta con un experto en nutrición para descartar efectos secundarios. Foto: composición GLR/difusión
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Precauciones a tener en cuenta
Aunque el agua de perejil es segura para la mayoría, se debe consumir con moderación. Personas con enfermedades renales o embarazadas deben consultar previamente a su médico, ya que el perejil tiene propiedades diuréticas que podrían no ser adecuadas en ciertos casos.
