Con solo 26 años, Luka Dončić, estrella de la NBA y uno de los talentos más brillantes del baloncesto mundial, ha sorprendido esta temporada no solo por su nivel en la cancha, sino por una transformación física que ha generado conversación en toda la liga. Hoy, es esloveno muestra un cuerpo más atlético, definido y funcional. Y lo ha logrado gracias a una rutina de entrenamiento digna de una estrella de alto rendimiento.
Su cambio no se ha dado por arte de magia. Durante los últimos cuatro meses, Dončić ha trabajado a doble turno con su equipo personal en Croacia, siguiendo una estricta dieta sin gluten, una rutina de pesas adaptada a su juego y ejercicios específicos para mejorar el equilibrio, la fuerza y la recuperación. "Mi cuerpo se ve mejor", dijo en una entrevista reciente para Men's Health.
El entrenamiento de Luka Dončić para un cuerpo tonificado y resistente

La constancia, el entrenamiento personalizado y la alimentación balanceada son clave en la transformación física de cualquier atleta.
El plan que ha seguido Dončić es todo menos común. Su preparador físico, Anže Maček, diseñó sesiones de 90 minutos que combinan fuerza, cardio y técnica. La jornada comienza en ayunas, donde Luka trabaja ejercicios funcionales con bandas de resistencia, circuitos que incluyen sentadillas rumanas, press de banca, saltos y desplazamientos. La clave: entrenamiento sin pausas, movimientos explosivos y una constante exigencia muscular.
Además de la intensidad, el entrenamiento se adapta a los gestos del baloncesto. Cada circuito mezcla ejercicios de tren superior e inferior con prácticas de tiro, simulando situaciones reales de juego. También ha incorporado actividades recreativas como pádel y pickleball para estimular otras cadenas musculares y proteger las articulaciones. Todo esto ha fortalecido su fuerza excéntrica, vital para frenar y cambiar de dirección en la cancha.
Dieta, descanso y mentalidad

Más allá del ejercicio, Dončić ha seguido un plan integral que incluye ayuno intermitente, una ingesta diaria de más de 250 gramos de proteína.
Más allá del ejercicio, Dončić ha seguido un plan integral que incluye ayuno intermitente, una ingesta diaria de más de 250 gramos de proteína, batidos pos-tentrenamiento y comidas controladas. "La transformación física de Luka no ha sido solo estética, sino funcional", explican sus fisioterapeutas, que también evaluaron su rendimiento con pruebas de fuerza y resonancias.

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El descanso ha sido otro factor fundamental. Por primera vez en años, dejó de jugar baloncesto durante un mes completo para permitir la recuperación total del cuerpo. Esto, sumado al enfoque personalizado de su "Equipo Luka", ha optimizado su rendimiento. Su objetivo es claro: mantenerse competitivo durante al menos una década más. "No puedo parar ahora", asegura el jugador, decidido a mantener esta rutina de élite.