¿Alguna vez has tocado a otra persona y has sentido una descarga eléctrica? Este fenómeno, conocido como corriente eléctrica al tocar a alguien, es común y suele ser inofensivo, aunque puede resultar molesto. Este "calambrazo" ocurre principalmente por el fenómeno de la electricidad estática, que se produce cuando hay un desequilibrio entre los protones y los electrones en un material. Aunque esta descarga es inofensiva, es interesante entender cómo ocurre y por qué algunas personas parecen ser más propensas a experimentar este fenómeno.
Este tipo de descarga eléctrica al tocar a otra persona es más común de lo que pensamos. No solo se da cuando tocamos a un ser humano, sino también cuando tocamos objetos, especialmente en lugares como centros comerciales, donde los suelos y las superficies propician la acumulación de electricidad estática. A pesar de no ser peligrosa, es importante saber cómo se genera y cómo prevenirla en ciertas situaciones.
La ciencia detrás de la electricidad estática
Este tipo de descarga eléctrica al tocar a otra persona no solo se da cuando tocamos a un ser humano, sino también cuando tocamos objetos.
La electricidad estática se forma cuando los electrones (carga negativa) y los protones (carga positiva) no están equilibrados. En un estado normal, los átomos tienen la misma cantidad de cargas positivas y negativas, lo que se conoce como carga neutra. Sin embargo, cuando hay un exceso de una de estas cargas, se genera una fricción que resulta en electricidad estática. Este fenómeno es más frecuente en ciertos materiales como el pelo, la lana, el nailon y el poliéster, que tienden a acumular más cargas. Incluso las suelas de los zapatos de goma, que son aislantes, pueden contribuir a que llevemos electricidad estática en el cuerpo.
Según la experta en física de materiales, Isabel Cordero, este fenómeno ocurre con mayor frecuencia en ambientes secos o en lugares con baja humedad, como los centros comerciales, donde los materiales de los suelos y las alfombras favorecen la acumulación de cargas. De igual manera, el ser humano también es un conductor natural de electricidad, lo que explica por qué algunas personas parecen transmitir esta corriente al tocar a otros o a objetos.
Aunque los efectos de la electricidad estática no son peligrosos, las descargas pueden ser molestas y generar sobresaltos. Sin embargo, en entornos de riesgo, como cerca de materiales inflamables o equipos electrónicos sensibles, estas descargas podrían causar problemas.
Consejos para reducir la electricidad estática
A pesar de que la electricidad estática no representa un peligro grave para la salud, hay algunas recomendaciones para minimizar sus efectos y evitar molestias.
A pesar de que la electricidad estática no representa un peligro grave para la salud, hay algunas recomendaciones para minimizar sus efectos y evitar molestias. Una de las principales medidas es controlar la humedad ambiental. Mantener la humedad relativa por encima del 50% puede ayudar a reducir la acumulación de cargas eléctricas en el ambiente. Además, es recomendable conectar a tierra los objetos metálicos que puedan acumular electricidad estática y utilizar productos antiestáticos en superficies que sean propensas a electrizarse.
PUEDES VER: Tratamiento natural para la artrosis: Consejos de expertos para reducir el dolor desde casa
También es útil elegir materiales que no favorezcan la acumulación de electricidad estática. Optar por ropa de lana o algodón, en lugar de materiales sintéticos como el poliéster, puede ayudar a reducir la fricción y la acumulación de cargas. Otro consejo importante es mantener la piel hidratada, ya que la sequedad de la piel aumenta la probabilidad de que se acumule electricidad estática. Siguiendo estos consejos, es posible minimizar la sensación de corriente eléctrica al tocar a otras personas y evitar las molestias que puede causar este fenómeno.
