Las heridas de bala en el abdomen son consideradas una de las lesiones más letales en traumas por armas de fuego. Según un estudio publicado en Mortalidad ajustada por gravedad en pacientes con trauma transportados por la Policía, la tasa de mortalidad en estos casos es significativamente alta debido a la complejidad de la zona afectada.
La presencia de órganos vitales como el hígado, el páncreas y los intestinos hace que un disparo en esta región pueda causar hemorragias masivas y fallos multiorgánicos en cuestión de minutos.
El peligro de las hemorragias internas
Uno de los principales factores que determinan la letalidad de una herida de bala en el abdomen es la velocidad con la que se produce la pérdida de sangre.
De acuerdo con la información del National Center for Biotechnology Information (NCBI), muchas de estas lesiones resultan fatales antes de que la víctima pueda recibir atención médica. La bala puede perforar arterias importantes como la aorta abdominal, lo que causaría una hemorragia interna severa y un shock hipovolémico en poco tiempo.
Especialistas recomiendan realizar un control de daños inmediato para saber cómo actuar y no dejar morir a la persona herida. Foto: composición GLR/difusión
El tiempo de respuesta tras un disparo es crucial para la supervivencia del paciente. Los expertos en traumatología del American College of Surgeons indican que los primeros 60 minutos tras la herida, conocidos como la “hora dorada”, son fundamentales para evitar la muerte a causa de una hemorragia o un fallo orgánico.
En estos casos, la cirugía exploratoria inmediata es la única opción para reparar el daño interno y controlar el sangrado.
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El aumento de heridas por armas de fuego
El impacto de las armas de fuego en la sociedad es un tema de creciente preocupación. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, las lesiones por bala han aumentado en los últimos años debido a la accesibilidad de pistolas y rifles en diversas regiones. En países con altos índices de violencia armada, las heridas de bala abdominales representan una proporción importante de ingresos en hospitales de trauma.