La felicidad parece esquiva, y lo peor es que a menudo no nos permitimos ser felices. Expertos en desarrollo personal coinciden en que las pantallas se han convertido en una trampa, generando un bucle de repetición difícil de romper. Pasamos horas absorbidos por esta espiral, lo que nos lleva a descuidar lo que realmente nos gusta e importa.
Hemos perdido la capacidad de aburrirnos y dedicar tiempo a nuestras aficiones. Estamos atrapados frente a las pantallas, consumiendo información vacía e inmediata, que no aporta valor. Esto nos aleja de nuestros seres queridos y nos impide escucharnos a nosotros mismos. Este constante consumo de contenido superficial nos priva de momentos de conexión real y reflexión personal, esenciales para nuestro bienestar.

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Arthur Brooks, autor y profesor en Harvard, está transformando nuestra visión de la felicidad a través de sus charlas y cursos. Destaca la importancia de aburrirse, ya que es en esos momentos cuando nuestra mente "despierta" y puede formular las preguntas más trascendentales.

Es importante aburrirse para activar la mente y conseguir ser feliz.
La importancia del aburrimiento para activar la mente y mejorar la felicidad
Arthur Brooks explica que "cuando tu mente divaga y te aburres, tu 'red predeterminada' se activa, lo que te permite plantearte las grandes preguntas". Sin embargo, advierte que si estamos constantemente estimulados, ya sea navegando por Internet, haciendo clic sin parar o distraídos, nunca lograremos alcanzar ese momento de reflexión profunda.
El profesor recomienda prohibir el uso de dispositivos en sus clases y evitar su uso al principio y al final del día. Según él, "prohibir los teléfonos mejoraría significativamente la calidad de vida", ya que, a pesar de estar rodeados de personas, cada vez nos sentimos más solos.
El impacto de las redes sociales en nuestra creatividad y salud mental
Las redes sociales evitan que nos aburramos, ya que sus algoritmos están diseñados para mantenernos enganchados, generando dopamina y serotonina. Sin embargo, el aburrimiento es necesario para que el cerebro cree nuevas conexiones y fomente la creatividad.

El experto lamenta que las redes sociales impiden que las personas, especialmente los jóvenes, accedan a pensamientos profundos y reflexivos.
El experto lamenta que las redes sociales impiden que las personas, especialmente los jóvenes, accedan a pensamientos profundos y reflexivos, lo que contribuye a la crisis de salud mental. Según él, "Estamos usando mal nuestro cerebro. No le dejamos que no piense en 'nada', no le dejamos que piense en las grandes cuestiones de la vida". Agrega que "el aburrimiento no es un defecto. Es una característica. Deja que tu mente divague".
Brooks destaca que el aburrimiento estimula la creatividad, fomenta la productividad, ayuda a identificar metas y permite que el cerebro procese más información. Según él, "en la naturaleza, por ejemplo, podemos distraernos si queremos, igual que podríamos hacer en redes sociales, de tener la necesidad de 'pasar el rato'".