Beber agua es fundamental para mantener el cuerpo en equilibrio, especialmente en un país como Perú, donde las temperaturas pueden ser altas y el clima seco en muchas regiones. Sin embargo, la cantidad y el momento en que ingerimos líquidos también juegan un papel importante para una hidratación adecuada. Según la nutricionista Júlia Farré, consumir más de un vaso de agua durante las comidas puede ser una señal de que no estamos cuidando bien este aspecto fundamental de nuestra salud.
Cada vez más personas se preocupan por adoptar hábitos saludables, integrando una alimentación equilibrada con una rutina de ejercicios. No obstante, en el afán por mejorar nuestra salud, a veces pasamos por alto la forma correcta de beber agua durante la comida, un detalle que puede afectar la digestión y, a largo plazo, nuestro bienestar general.
El hábito de beber mucha agua al comer puede indicar mala hidratación

Una correcta hidratación a lo largo del día reduce la necesidad de beber grandes cantidades de agua durante las comidas.
Es común que durante las comidas se ingieran grandes cantidades de agua o bebidas similares, pensando que esto es beneficioso para la digestión. Sin embargo, la especialista Júlia Farré advierte que este hábito puede estar asociado a una mala hidratación previa. Cuando el cuerpo no recibe suficiente agua durante el día, la sensación de sed aumenta notablemente al momento de comer, lo que impulsa a beber más líquidos de lo necesario.
Beber excesivamente durante la comida no solo puede diluir los jugos gástricos, dificultando la digestión, sino que también es un indicativo de que el organismo necesita ser hidratado en otros momentos del día. Farré recomienda consumir agua de forma constante a lo largo del día para evitar esta sensación de sed intensa en las comidas, lo que contribuirá a un mejor funcionamiento del sistema digestivo y a mantener el cuerpo bien hidratado.
Consejos para mejorar la hidratación y cuidar tu salud

Beber más de un vaso de agua al comer podría ser señal de una hidratación deficiente, advierte la nutricionista Júlia Farré.
Mantener una hidratación adecuada es especialmente importante en zonas cálidas o durante las estaciones más calurosas, como ocurre en muchas regiones del Perú. Para ello, la nutricionista Júlia Farré sugiere distribuir el consumo de agua en pequeñas cantidades durante la mañana y la tarde, de manera que al momento de las comidas no se sienta la necesidad de beber en exceso.
Adoptar este hábito no solo favorece una digestión óptima, sino que también ayuda a prevenir problemas relacionados con la deshidratación, como la fatiga, dolores de cabeza o inflamación. En definitiva, cuidar cuándo y cuánto agua bebemos es tan importante como la cantidad total de líquido que ingerimos, siendo un detalle clave para preservar nuestra salud y bienestar diario.