El durián (Durio zibethinus), originario del sudeste asiático, es famoso por su olor penetrante —descrito como una mezcla entre cebolla podrida y queso fuerte—, pero también por su riqueza nutricional.
Según El País, esta fruta es tan intensa que su consumo está prohibido en hoteles y aeropuertos de países como Tailandia y Singapur. Sin embargo, quienes superan su particular aroma descubren un alimento altamente beneficioso para la salud.
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Estos son los beneficios ocultos del durián
De acuerdo con Plataforma Tierra, el durián contiene un alto contenido de fibra, ideal para mejorar la digestión y regular el tránsito intestinal. Además, es una fuente potente de vitamina C, potasio, vitamina B6 y antioxidantes que refuerzan el sistema inmunológico, ayudan a controlar la presión arterial y reducen el daño celular.
La Universidad Nacional de Singapur ha realizado estudios que relacionan el consumo de durián con una mejora en los niveles de serotonina gracias a su contenido de triptófano, lo que podría tener efectos positivos en el estado de ánimo.
¿Qué dicen los nutricionistas sobre el durián?
La nutricionista clínica Dra. Carla Zaplana afirma que "más allá de su olor, el durián tiene un perfil nutricional muy completo y es especialmente útil en dietas vegetales por su aporte energético y antioxidante". Su consumo moderado es recomendado, ya que también es calórico y denso.
Aunque su olor pueda disuadir a muchos, el durián representa una alternativa natural y poderosa dentro del mundo de la nutrición-frutas. Atrévete a probarlo y descubre por qué esta fruta prohibida es, para muchos, un superalimento con beneficios inigualables.

Comer un durián es una experiencia sensorial que vale la pena, según diversos usuarios en internet. Foto: composición GLR/EFE

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¿Cómo se debe comer el durián?
El durián se consume principalmente fresco, extrayendo su pulpa amarilla y cremosa directamente del interior de su cáscara espinosa. Se recomienda usar guantes o utensilios debido a su olor persistente y la textura pegajosa de la fruta, según El País.
En muchos países del sudeste asiático, como Tailandia y Malasia, se come como postre o snack, solo o acompañado de arroz pegajoso. También puede incorporarse en batidos, helados o productos horneados. Es importante abrirlo en espacios ventilados, ya que su fuerte aroma puede impregnar el ambiente durante horas.
Nutricionalmente, el durián es una fruta densa y energética, por lo que se aconseja consumirlo en porciones moderadas. Su pulpa es rica en carbohidratos, grasas saludables, fibra y compuestos antioxidantes como flavonoides y polifenoles.
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), también contiene vitaminas B, C y minerales como el potasio y el hierro. Algunos estudios, como los realizados por la Universidad Nacional de Singapur, sugieren que su contenido en triptófano puede favorecer el estado de ánimo. Aun con todos sus beneficios, su consumo debe integrarse dentro de una dieta equilibrada.