La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta las articulaciones, provocando dolor, rigidez y pérdida de movilidad. Aunque no tiene cura, el tratamiento natural a través de la alimentación puede aliviar significativamente los síntomas. Diversos estudios universitarios en nutrición clínica apuntan al rol de ciertos jugos con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que podrían contribuir al bienestar articular.
Según el portal Mundo Deportivo, combinaciones como zanahoria con apio, cúrcuma con piña, o jugo de cereza ácida son ricas en compuestos bioactivos que ayudan a reducir la inflamación. Además, el jugo de naranja —citado por Terapia Celular Perú— es rico en vitamina C, un nutriente clave para la producción de colágeno y la salud del cartílago.
Ingredientes naturales con evidencia científica
La nutricionista clínica española Esther Tellería indica que la inclusión diaria de jugos naturales ricos en antioxidantes puede contribuir a combatir el estrés oxidativo, uno de los factores que acelera el desgaste articular. En ese sentido, frutas como la papaya, el kiwi, la granada o los arándanos destacan por su contenido en polifenoles y vitamina E.
Especialistas recomiendan consumir estos jugos en ayunas o entre comidas, sin azúcares añadidos, para potenciar su absorción y beneficios. No sustituyen al tratamiento médico, pero sí pueden ser parte de una estrategia nutricional complementaria.

No olvides consultar con un profesional de la salud antes de comenzar una dieta nueva. Foto: composición GLR/difusión
Recomendaciones para integrar jugos en tu rutina
- Prefiere jugos naturales recién exprimidos.
- Combina frutas antiinflamatorias con verduras ricas en fibra.
- Tómalos sin endulzantes ni conservantes.
- Consulta con tu médico o nutricionista antes de incorporarlos como parte regular de tu dieta.
¿Los jugos naturales tienen efectos secundarios?
Los jugos naturales pueden tener efectos secundarios si se consumen en exceso o sin supervisión. Aunque están hechos de frutas y vegetales, algunos contienen altos niveles de azúcar natural, lo que puede elevar la glucosa en personas con diabetes o causar molestias digestivas.
Además, ciertos ingredientes como el jengibre o la cúrcuma pueden interactuar con medicamentos anticoagulantes o antiinflamatorios.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU. y la Clínica Mayo, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de incorporar estos jugos como parte de un tratamiento complementario, especialmente si se toman medicamentos o se tiene una condición crónica.