La polémica surgió cuando Gustavo Salcedo reveló que su esposa, la presentadora Maju Mantilla, habría mantenido conversaciones comprometedoras con su productor Christian Rodríguez. Aunque la situación escaló a nivel mediático por la figura pública de ambos, el verdadero tema de fondo se centra en el uso de redes sociales como una posible vía para mantener relaciones paralelas. El propio deportista afirmó que descubrió mensajes privados entre su pareja y su colega de trabajo, lo que desató la interrogante: ¿las redes sociales aumentan la infidelidad?
¿Qué dicen los expertos sobre la infidelidad y redes sociales?
Según un informe publicado por la American Association of Psychology, aproximadamente el 30% de los usuarios ha coqueteado con alguien por redes, mientras que el 10% admite haber llevado esos intercambios al plano físico. Estas cifras respaldan la idea de que las plataformas digitales, aunque creadas para conectar, también pueden facilitar situaciones que afectan directamente a la fidelidad en una relación estable. El fácil acceso a ex parejas, conocidos o personas nuevas crea un entorno propenso a la tentación emocional o íntimo.
¿Qué tipo de conexión se considera infidelidad en la era digital?
Un estudio del Journal of Cyber Psychology and Behavior reveló que el 60% de los encuestados considera que mantener conversaciones afectivas en línea con alguien fuera de la relación representa una forma de engaño. Aunque no haya contacto físico, el vínculo emocional puede generar daño real. Los mensajes constantes, las confesiones personales o incluso los halagos reiterados crean un espacio íntimo paralelo que muchas veces se esconde del otro, lo que indica una pérdida de transparencia en la relación.

Aunque no haya contacto físico, el vínculo emocional puede generar daño real.
¿Cuál red social es más usada para engañar?
Entre las plataformas mencionadas en distintos estudios, Facebook encabeza la lista como la más utilizada para iniciar vínculos extraconyugales, debido a su amplio alcance y la posibilidad de reconectar con personas del pasado. Le siguen Instagram y WhatsApp, donde el intercambio de mensajes privados se vuelve más directo y personal. Estas redes permiten mantener un canal constante de comunicación, muchas veces sin levantar sospechas, lo que convierte su uso en un terreno riesgoso cuando no existe claridad en los límites de pareja.
¿Cómo prevenir una infidelidad por redes sociales?
Para reducir el riesgo de caer en este tipo de comportamientos, los especialistas recomiendan establecer acuerdos específicos en la pareja. Hablar con honestidad sobre lo que cada uno considera una falta de respeto, evitar conversaciones privadas con personas con las que haya tensión romántica, y promover la transparencia con contraseñas o accesos compartidos puede fortalecer la confianza. Además, dedicar tiempo de calidad a la relación y mantener una comunicación real puede hacer que la conexión emocional no dependa de factores externos.
¿Estamos frente a una nueva forma de engaño?
El debate sobre si los mensajes o interacciones virtuales representan infidelidad aún divide opiniones, pero lo cierto es que la carga emocional que pueden generar afecta profundamente las relaciones. La tecnología avanza, pero el respeto mutuo y la honestidad siguen siendo fundamentales para construir una convivencia basada en el compromiso.