Una infección común podría desencadenar hasta 12 millones de casos de cáncer de estómago.
Una infección común podría desencadenar hasta 12 millones de casos de cáncer de estómago. GLR

Alerta médica: la bacteria silenciosa que podría causar millones de casos de cáncer de estómago, según expertos

|14 julio 2025

El cáncer de estómago sigue siendo uno de los más letales del mundo, especialmente en países con acceso limitado a diagnóstico temprano. A pesar de que su incidencia ha disminuido en algunos lugares, su impacto global sigue siendo alarmante: cada año se cobra la vida de cientos de miles de personas, muchas de ellas sin haber notado síntomas hasta etapas avanzadas. El pronóstico, en la mayoría de los casos, depende del momento en que se detecta.

Detrás de esta forma de cáncer, silenciosa y agresiva, se encuentra una amenaza microscópica: Helicobacter pylori. Esta bacteria, común en millones de personas en todo el mundo, se instala en el revestimiento del estómago desde edades tempranas y, con el paso del tiempo, puede desencadenar procesos inflamatorios que evolucionan hacia cáncer gástrico. Un estudio reciente estima que esta infección podría estar detrás de casi 12 millones de futuros casos en una sola generación, si no se toman medidas urgentes de prevención y tratamiento.

¿Cómo actúa la bacteria que causa cáncer de estómago?

La infección por Helicobacter pylori puede permanecer silenciosa durante años antes de desencadenar complicaciones como úlceras o cáncer gástrico.

La infección por Helicobacter pylori puede permanecer silenciosa durante años antes de desencadenar complicaciones como úlceras o cáncer gástrico.

A diferencia de otros factores de riesgo, la Helicobacter pylori no produce efectos inmediatos. Suele adquirirse en la infancia, especialmente en contextos de pobreza, hacinamiento o falta de acceso a agua potable. Una vez instalada en el revestimiento gástrico, puede generar inflamaciones persistentes que, con el tiempo, dan lugar a úlceras o incluso carcinomas gástricos y linfomas.

La transmisión suele darse de persona a persona, ya sea por contacto oral o fecal-oral. Su prevalencia varía entre regiones, lo que demuestra que el problema no solo es médico, sino también social. En Perú, por ejemplo, estudios locales han identificado tasas de infección superiores al 60 % en algunas zonas rurales. Esta situación convierte a la erradicación de la H. pylori en una prioridad de salud pública con impacto directo en la prevención del cáncer gástrico.

Tratamiento y prevención del Helicobacter pylori y cáncer

Aunque el panorama parece preocupante, también existe una oportunidad real de reducir los riesgos. El cáncer gástrico no es completamente inevitable: puede prevenirse en muchos casos si se identifica y trata la infección a tiempo. A continuación, algunas claves para combatir esta amenaza silenciosa:

Expertos advierten que detectar la bacteria H. pylori a tiempo podría prevenir millones de casos de cáncer de estómago en todo el mundo.

Expertos advierten que detectar la bacteria H. pylori a tiempo podría prevenir millones de casos de cáncer de estómago en todo el mundo.

  • Diagnóstico precoz: Existen pruebas específicas para detectar la infección por H. pylori, como el test de aliento, análisis de heces o endoscopías. Detectarla a tiempo es fundamental.
  • Tratamiento con antibióticos: La erradicación de la bacteria se logra mediante una combinación de antibióticos y medicamentos inhibidores de ácido gástrico. Es vital seguir el tratamiento completo indicado por un médico.
  • Mejora del saneamiento: La prevención también implica mejorar las condiciones de vida. El acceso a agua potable y hábitos de higiene adecuados son clave para frenar la propagación.
  • Educación y campañas de salud pública: La información puede marcar la diferencia. Sensibilizar a la población sobre los síntomas, riesgos y tratamientos disponibles puede evitar miles de diagnósticos futuros.

Según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, “la infección por H. pylori es un factor de riesgo modificable con potencial para reducir en más del 75 % los casos de cáncer gástrico en ciertas regiones del mundo”. En resumen, una detección oportuna, el acceso al tratamiento y políticas públicas bien enfocadas podrían evitar millones de muertes. La lucha contra el cáncer gástrico empieza por combatir a esta diminuta pero poderosa bacteria.