Durante años, los remedios para dormir han incluido desde infusiones hasta vasos de leche caliente. Sin embargo, la ciencia señala ahora hacia una fruta tropical de alto valor nutricional y sorprendente eficacia para mejorar el sueño: las cerezas.
Según La Vanguardia, las cerezas —especialmente las variedades oscuras como la cereza ácida o “tart cherry”— contienen altos niveles de melatonina, una hormona clave en la regulación del ciclo sueño-vigilia. Esta fruta no solo es deliciosa, sino que también ayuda al organismo a producir melatonina de forma natural y efectiva.

Cerezas: pequeñas, sabrosas y poderosas aliadas del descanso. Foto: composición GLR/difusión
Una investigación publicada en el Journal of Experimental Botany demostró que las cerezas poseen niveles más elevados de melatonina en comparación con otros alimentos, y que esta es absorbida más eficientemente que la forma sintética. Esto significa que incluir cerezas en la dieta diaria puede ser tan o más efectivo que ciertos suplementos.
Más allá del sueño: beneficios globales para la salud
La melatonina no solo regula el sueño, sino que también actúa como antioxidante y antiinflamatorio. Su consumo a través de frutas naturales como las cerezas aporta una ventaja adicional: la combinación de vitaminas, flavonoides y polifenoles que fortalecen el sistema inmunológico.
En palabras de especialistas citados por CuidatePlus, el consumo habitual de frutas ricas en melatonina puede “favorecer una mejora en la calidad del sueño sin necesidad de medicación”, especialmente en personas mayores o con insomnio ocasional.
Estudios como el desarrollado por la Universidad de Rochester también lo confirman: adultos mayores que bebieron jugo de cereza ácida dos veces al día durante dos semanas aumentaron significativamente la duración y la eficiencia del sueño.
Etileno, maduración y sueño: lo que revela la ciencia botánica
Un estudio publicado en Postharvest Biology and Technology sobre la “percepción de etileno y la degradación de la pared celular durante la abscisión” explica cómo las frutas como la cereza regulan sus procesos de maduración y liberación de compuestos bioactivos.
El etileno, una hormona vegetal que regula la maduración, también influye en la liberación de sustancias como la melatonina. Este vínculo entre fisiología vegetal y beneficio humano es una pista interesante para entender por qué ciertas frutas impactan en nuestro bienestar.
Cómo incorporarla a tu dieta
- Añade cerezas frescas o congeladas a tu cena o como postre.
- Opta por jugo de cereza ácida sin azúcar antes de dormir.
- Combina cerezas con yogur o avena para una merienda nocturna rica en triptófano.