En Lima y otras ciudades del país, donde el tráfico puede convertir un viaje corto en una odisea, la bicicleta se presenta no solo como una solución práctica, sino también como una opción altamente eficiente. De acuerdo con recientes investigaciones, andar en bicicleta no solo permite llegar más rápido a destino, sino que puede ser hasta cuatro veces más eficiente que caminar.
Este hallazgo proviene de un análisis científico que comparó el gasto energético entre caminar y pedalear en distancias cortas, como cinco kilómetros. Lejos de ser una simple cuestión de velocidad, la diferencia radica en cómo el cuerpo usa la energía: caminar implica impactos repetitivos y pérdida de fuerza con cada paso; en cambio, el pedaleo ofrece un movimiento continuo y más económico desde el punto de vista físico.
Andar el bicicleta es más eficiente que caminar

Andar en bicicleta no solo permite llegar más rápido a destino, sino que puede ser hasta cuatro veces más eficiente que caminar.
Según Anthony Blazevich, profesor de Biomecánica en la Universidad Edith Cowan de Australia, “cuando caminamos o corremos, estamos amortiguando una caída controlada a cada paso”, lo que supone un gasto muscular innecesario. Pedalear, en cambio, permite trabajar en un ciclo cerrado de fuerza continua, sin esos impactos, lo que convierte a la bicicleta en una extensión eficiente del cuerpo humano.
Además, gracias a los engranajes, el ciclista puede adaptar la resistencia y mantener a sus músculos en un rango de trabajo óptimo, lo que se traduce en mayor eficiencia energética. Esta ventaja mecánica, combinada con las ruedas, convierte el movimiento en tracción sin fricción innecesaria. Por eso, en términos de energía y desplazamiento, la bicicleta gana por goleada frente a caminar, especialmente en entornos urbanos como Lima, donde el tráfico y las distancias cortas predominan.
Beneficios de andar en bicicleta
La eficiencia del ciclismo no se limita al plano físico. Estudios recientes, como el publicado en Frontiers in Sports and Active Living, han demostrado que andar en bicicleta de manera regular reduce el riesgo de mortalidad general entre 17% y 30%, incluso en ambientes urbanos contaminados. A su vez, mejora la salud cardiovascular, reduce el riesgo de diabetes tipo 2 y fortalece músculos sin dañar las articulaciones, algo clave para adultos mayores.

Andar en bicicleta no solo es una forma rápida y eficiente de desplazarse, sino también una opción que mejora la salud.
En el plano económico, el ciclismo también representa un alivio. Diversos informes han revelado que recorrer un kilómetro en bicicleta cuesta menos de la mitad que hacerlo en auto. Y en términos de salud pública, fomentar el uso diario de la bicicleta podría ahorrar millones al sistema sanitario. En el contexto limeño, donde muchos trayectos diarios son menores a 5 km, pedalear puede ser tanto una elección inteligente como una apuesta sostenible.

PUEDES VER: ¡Tienes que probarlo! El ejercicio que elimina los kilos de más en 15 minutos, según un estudio
Beneficios más allá del ejercicio
Andar en bicicleta no solo es una forma rápida y eficiente de desplazarse, sino también una opción que mejora la salud, reduce la congestión vehicular y disminuye las emisiones contaminantes. Aunque existen riesgos como colisiones o exposición al smog, diversos estudios demuestran que los beneficios del pedaleo los superan ampliamente, incluso en ciudades con alta contaminación. En distritos limeños como San Borja o Miraflores, adoptar la bicicleta como medio de transporte puede ser un cambio positivo para la salud personal y el bienestar colectivo.