Por qué el ejercicio es fundamental para los adultos mayores.
Por qué el ejercicio es fundamental para los adultos mayores. Prensa Libre

Ejercicio en adultos mayores: por qué es clave para una vida larga y activa

|07 julio 2025

Envejecer no significa renunciar al movimiento. Aunque muchos asumen que la edad avanzada es sinónimo de inactividad, los especialistas en geriatría coinciden en que todo lo contrario: mantener una rutina de ejercicios es una de las mejores decisiones para preservar la independencia, la salud y el bienestar físico y emocional. Para los adultos mayores, incluso una caminata diaria o ejercicios suaves pueden generar un gran impacto.

Estudios recientes demuestran que las personas mayores que adoptan actividad física regular mejoran su calidad de vida y reducen significativamente el riesgo de enfermedades crónicas. La buena noticia es que nunca es tarde para comenzar. Según el geriatra Timothy Farrell, de la Universidad de Utah, la actividad física en personas mayores es tan importante que incluso podría prevenir hospitalizaciones prolongadas y pérdida de movilidad.

¿Por qué el ejercicio es tan importante después de los 60?

El ejercicio en adultos mayores fortalece los músculos, protege los huesos, mejora el equilibrio y previene caídas.

El ejercicio en adultos mayores fortalece los músculos, protege los huesos, mejora el equilibrio y previene caídas.

La evidencia científica es contundente: el ejercicio en adultos mayores fortalece los músculos, protege los huesos, mejora el equilibrio y previene caídas. También contribuye a controlar enfermedades como la diabetes, la hipertensión y la depresión, y reduce el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. Además, hay un beneficio poco visible pero muy poderoso: mantener el cerebro activo y la mente clara.

Por otro lado, la falta de movimiento puede generar consecuencias preocupantes. Farrell advierte que el tiempo prolongado en cama durante una hospitalización puede provocar una pérdida importante de masa muscular. Esta situación, sumada a la fragilidad, suele derivar en dependencia, internamientos innecesarios y una recuperación mucho más lenta. Promover el movimiento, ya sea con caminatas, fisioterapia o clases adaptadas, es una herramienta de salud pública fundamental.

Cómo empezar una rutina de ejercicios a cualquier edad

Para los adultos mayores, una caminata diaria o ejercicios suaves pueden generar un gran impacto.

Para los adultos mayores, una caminata diaria o ejercicios suaves pueden generar un gran impacto.

Tener más de 60 o 70 años no es una barrera. Los expertos recomiendan comenzar con rutinas suaves de 20 a 30 minutos, cinco veces por semana. Actividades como caminar, nadar, bailar, hacer Tai Chi o trabajar con pesas ligeras son ideales. Estas prácticas fortalecen el cuerpo sin ponerlo en riesgo. Para personas que llevan una vida sedentaria, lo ideal es empezar poco a poco, siempre escuchando las señales del cuerpo.

Las rutinas que combinan ejercicios aeróbicos, fuerza y equilibrio ofrecen mayores beneficios. Incluir ejercicios guiados o en grupo puede facilitar la constancia y hacer del movimiento un hábito sostenible. La clave está en adaptar el ritmo y tipo de actividad a las capacidades individuales. Como dice Farrell: “El ejercicio es una de las pocas medicinas que es gratuita, segura y efectiva. Y es la más potente que existe contra el envejecimiento”.